Discos viejos

miércoles, 22 de octubre de 2008

Madame Ivonne


La letra de este tango (que se remonta al año 1933) es de Domingo Enrique Cadícamo y la música de Eduardo Gregorio Pereyra.

Madame Ivonne fue la última grabación que Carlos Gardel realizara en la ciudad de Buenos Aires, con sus guitarristas Pettorossi, Barbieri, Riverol y Vivas, antes de partir rumbo a Europa.
Julio Sosa grabó, en el año 1962, una de las versiones más conocidas de este tango, haciéndolo acompañado por la orquesta de Leopoldo Federico. Sosa comenzaba la mencionada grabación (que efectuara para la compañía discográfica CBS), con tal recitado introductorio: "Ivonne, yo te conocí en el viejo Montmartre, cuando el cascabel de plata de tu risa era un refugio para nuestra bohemia, y tu cansancio y su anemia no se dibujaban aún detrás de tus ojeras violetas... Yo te conocí cuando el amor te iluminaba por dentro, y te adoré de lejos sin que lo supieras y sin pensar que confesándote este amor podía haberte salvado... Te conocí cuando era yo un estudiante de bolsillos flacos y el París nocturno de entonces lanzaba al espacio, en una cascada de luces, el efímero reinado de tu nombre... Mademoiselle Ivonne...".

Hay quienes afirman que Ivonne era, en la vida real, la dueña de una pensión barata en Montevideo, en la que se alojaba el compositor Eduardo Pereyra (autor de la música de este tango).



Mademoiselle Ivonne era una pebeta

en el barrio posta del viejo Montmartre.

Con su pinta brava de alegre griseta

animó las fiestas de Les Quatre Arts.

Era la papusa del Barrio Latino

que supo a los puntos del verso inspirar,

pero fue que un día llegó un argentino

y a la francesita la hizo suspirar.



Madame Ivonne,

la Cruz del Sur fue como un sino;

Madame Ivonne,

fue como el sino de tu suerte...

Alondra gris,

tu dolor me conmueve;

tu pena es de nieve,

Madame Ivonne...



Han pasado diez años que zarpó de Francia,

Mademoiselle Ivonne hoy es sólo "Madame";

la que al ver que todo quedó en la distancia

con ojos muy tristes bebe su champán...

Ya no es la papusa del Barrio Latino;

ya no es la mistonga florcita de lis...

ya nada le queda de aquel argentino

que entre tango y mate la alzó de París.


Letra: Domingo Enrique Cadícamo
Música: Eduardo Gregorio Pereyra

1 comentario:

Mauricio dijo...

Hola muy bueno el sitio, comienzo a estudiar canto y me gusta mucho el tango.Precisamente tengo que ensayar este tema y buscaba informacion que por cierto es muy completa. Muchas gracias por el trabajo de subirla. En cuanto al lunfardo ya "descifré" todos los términos pero me queda colgado cuando dice"..animó las fiestas de les Quatre Arts" sería éste el supuesto burdel o motel decadente que comandaba ?? Gracias por responder.